La prensa en México y Estados Unidos amaneció hoy con dos notas automovilisticas de distinto índole: En México los periódicos llevan algunas semanas regodeándose sobre los automóviles de Vicente Fox. Primero arremetieron contra un Jeep rojo que resultó ser un regalo exigido por su esposa a un distribuidor de estos automoviles. Ahora las primeras planas anuncian que Fox tendrá que regresar el Hummer que tenía en comodato.
En Estados Unidos por su parte, se festejan los 50 años del Edsel. En su tiempo un fracaso comercial, y hoy día un hito de aquella época, en particular de sus excesos. El Edsel fue introducido al mercado por Ford Motor Company el 4 de septiembre de 1957. Hasta la fecha ha habido varios festejos organizados por fanáticos, pero la compañia no se ha dignado prestarle atención a la "efemeride". Posiblemente porque la industria automotriz americana no tiene mucho que festejar, mucho menos después de que el Nobel de la Paz fuera otorgado a Al Gore.
Entre las particulariadades que hacen al Edsel una ícono de los 50 esta su tamaño. Como el Hummer, es un automovil que rebasa la sensatez del buen ciudadano, ofende al peatón y pone en peligro la vida de ciclistas y motociclistas. Pueden no ser muy contaminantes, pero como consumen energía. El Edsel, y en su caso el Hummer, podrían ser un emblema de la lucha contra el cambio climático global. Imagino la consigna "¡nunca más un Edsel!".
Un tratamiento interesante de autos mounstruosos es la clásica película Christine, de John Carpenter. Aunque un Plymouth y no un Edsel, Christine es un clásico auto de los 50s, el epitome del cosumismo, el mismisimo chamuco.
Si alguien esta leyendo, se los dejo de tarea. . .
saludos
Manolog
No comments:
Post a Comment